La tasa de desempleo y subempleo, el porcentaje de matriculados por nivel de educación, la
incidencia de la pobreza y la distribución de la riqueza son el resultado, entre otros factores, de la situación del ciclo económico.
Entre 2007 y 2010 el curso económico en Ecuador tuvo tres momentos marcados. El primero de ellos estuvo signado por el aumento del precio de los bienes primarios y el petróleo en los mercados internacionales, lo que generó un boom económico. El segundo tuvo como escenario el inicio de la crisis en los países del Norte industrializado y la transmisión al resto del mundo por la contracción del comercio mundial y la reducción de las remesas de los migrantes y de los precios de las materias primas. El tercero, en cambio, se caracterizó por la superación de los efectos de la crisis en la mayoría de los países denominados emergentes y el principio de una nueva etapa de crecimiento. En cada una de estas etapas se tomaron medidas de política económica para hacer frente al ciclo, como se analiza en el presente libro.
En el período, además, se opera un cambio en el contenido de la política pública. Tal cambio,
al menos en lo que respecta a lo social, condujo al aumento del gasto sectorial con respecto al PIB a niveles nunca antes registrados. De esa forma, aumentó la oferta en salud, educación y se amplió la red de protección social, a la vez que se dotó a los escolares de uniformes y materiales de aprendizaje, entre otros. También, como parte de la política social, cambiaron algunas de las reglas que norman el mercado laboral, como la prohibición de la tercerización y los aumentos del salario mínimo vital, medidas que compensaron la inflación, de manera que se ha ido reduciendo el déficit de los hogares para acceder a la canasta básica de consumo. Este libro analiza la influencia del ciclo económico en el sector social.